Una casa de verano siempre tiene unas peculiaridades que la distinguen de la vivienda habitual, por el poco uso que se hace de ella durante el año, así como las grandes dimensiones con las que suelen contar.
Más allá de la idealización de esta vivienda como el espacio en el que disfrutar de las mejores vacaciones posibles, lo cierto es que hay una serie de aspectos a mejorar de los que se suelen dar cuenta cuando sus inquilinos llegan al destino estival.
Por ello, en este post vamos a exponer los diferentes consejos para reformar una casa de verano con todas las garantías.
Casa verano: los problemas más habituales cuando llega el propietario
La casa verano acumula mucho tiempo en el que no pasa ninguna persona por ella, por lo que hay que analizar a fondo cuáles son los aspectos a mejorar para optimizarla y que sus prestaciones sean las mejores en la finalidad que tiene.
Los problemas que más se dan cuando el propietario llega a la casa tras la larga temporada de temperaturas más frías son los siguientes:
- Jardín: en caso de no acudir a la casa de verano durante todo el año, lo más normal es que el jardín presente un aspecto descuidado debido a su inoperancia. Por tanto, la máquina cortacésped tendrá un arduo trabajo por delante cuando el propietario llegue para disfrutar de las vacaciones y poner a punto este espacio tan idílico.
- Piscina: la mayor parte de las casas de verano cuentan con una piscina donde disfrutar de unos chapuzones en los momentos en que el termómetro se dispare. Así, toca la limpieza a fondo de toda la piscina, vaciado de los residuos y llenado para una nueva temporada de sol y calor teniendo un lugar privado en el que refrescarse. Una casa de verano con piscina suele acarrear, por tanto, mayor trabajo
- Instalaciones: debido al desuso, en muchas ocasiones es posible que las instalaciones estén deterioradas y sea necesario un proceso de aclimatación hasta que su funcionamiento sea el correcto.
- Arreglos de bricolaje: se pueden presentar algunos desajustes en materia de bricolaje en la casa de verano, desde arreglar algún defecto de pintura o yeso de la pared, hasta lámparas o apliques descolgados o deteriorados.
- Electrodomésticos: al no estar en continua actividad, como sucede con las viviendas de uso habitual, los electrodomésticos pueden caer en pequeños problemas y averías que requieran la mano de un especialista.
Estos son algunos de los problemas más comunes que se pueden dar cuando una persona acude a su casa de verano, tras un largo periodo lejos de este inmueble.
En caso de defectos que exijan la intervención de un equipo de profesionales especializados en reformas de todo tipo, la mejor opción es acudir a una empresa de reformas integrales, que se puede ocupar de cada uno de los problemas que se pueden presentar para el acondicionamiento de cualquier vivienda o local.
